Jere Sosa, un músico necochense reconocido en Australia

Hace cuatro años Jere Sosa emigró hacia Australia desde Necochea para concretar sus bastos sueños musicales. Se radicó en Freemantle, una pequeña ciudad de poco más de 25 mil habitantes ubicada en la costa del estado de Australia Occidental, a 19 km de Perth la capital y ciudad más grande del estado.

Desde que llegó a Freemantle, el joven necochense de 30 años logró vivir de su pasión, realizando música callejera y poco a poco, logró contratos para tocar en diversos lugares.

El 2017 lo recibió con un nuevo disco "Coming Back home in two footsteps" que contó con una fuerte realización de la mano de productores reconocidos y la nominación de la canción “Taste of Honey”, en el rubro “World” de los WAM Awards.

El músico independiente contó un breve recorrido por sus últimos años en Australia en diálogo con Cuatro Vientos, donde manifestó que “para vivir de la música me manejo bastante bien. En mis primeros meses y quizás años le metí mucho al "busking" que es la musica callejera, pero siempre me gusto hacerlo con buena amplificación y pedales porque de esa manera puedo hacer más la música que me gusta”.

Con el correr de los años, Jere fue cimentando las bases en aquel país. “Fui ampliando los contactos y los distintos lugares que me contratan para tocar. Además de eso también tengo mi proyecto solista, que somos un cuarteto”, expresó y añadió que “toco en un grupo de música tradicional cubana llamado Al Medio Son”.

Sobre la producción de su último trabajo discográfico, destacó que “fue un proceso largo la verdad, algunas de las canciones fueron compuestas como hace 3 años atrás, otras surgieron durante la producción de los demos y maquetas del álbum”.

“Ya con una idea más clara, contacte con músicos muy talentosos tanto de Australia como gente de todos lados que conocí en la calle y se sumaron a contribuir. El último detalle y el cierre de oro fue Masterizarlo con Rob Grant”, responsable de trabajos de grandes bandas como Tame Impala y Pond, entre otros.

“El álbum fue grabado en Poons Head Studio y la verdad que valió la pena trabajar con terrible equipamiento ya que el disco suena muy bien”, expresó el talentoso músico necochense.

La canción número 7 de "Coming Back home in two footsteps" llamada “Taste of honey”, fue la ganadora del premio “Song of The Year in the World Category” de los WAM Awars, una entrega de premios que se realiza entre los músicos de la región de Western Australia, la más grande de aquel país.

“Taste of Honey” sobresalió entre otras cuatro canciones: “Justice”, de 56 Hope Road; “Run Run”, Barefeet Sojourns; “Roll Your Eyes”, de Brassika y “Point Of Departure” de Kate Pass Kohesia Ensemble.

En ese sentido, Sosa explicó a este portal que “las únicas condiciones para participar son: residir en W.A. y que la canción haya sido escrita en el último año” y agregó que “como yo recién sacaba el disco pensé en anotarme y mandé un par de canciones en distintas categorías. Una de ella quedo seleccionada entre los 5 nominados y luego, en la noche de la ceremonia, me enteré que había ganado en esa categoría”.

“Aparentemente les gustó mucho el trabajo vocal y las guitarras, que tienen una onda "flamenca" por eso está en la categoría World Music”, expresó.

Sobre la importante distinción, el músico dijo que “ganar un premio y obtener reconocimiento fuera de tu país fue una sensación increíble”, al tiempo que agregó que “me acuerdo que trate de no ilusionarme mucho porque la canción tiene una onda muy especial y pensé que quizás no sería lo que ellos elegirían como ganadora”.

“Me acuerdo que tenía en mi cabeza practicados al menos 10 discursos distintos que iba a dar, bastante amplios y al momento de subir ahí y de ver mi nombre en la pantalla, obvio que se me olvidó absolutamente todo lo que tenía ensayado. Entonces subí y agradecí a mi novia, productor y masterizador del disco, y eso fue todo, pero en resumen una sensación muy muy linda”, concluyó.