NECOCHEA (Cuatro Vientos) - Del encuentro informó el propio operador k local, Gustavo Florentín a través de su cuenta de Twitter: el ministro de seguridad de la provincia de Buenos Aires, Alejandro Granados, mantuvo una reunión con Roberto Porcaro en su casa de Barrio Médanos.
Luego del acto de egreso de los 73 cadetes de la escuela de policía descentralizada Juan Vucetich, el funcionario provincial salió en coche rumbo al barrio Médanos, donde lo esperaba Porcaro. El helicóptero de la policía en el que había llegado partió vacío, aunque fue hasta el barrio privado para luego recoger al ministro.
Del encuentro, del que también participó el concejal Marcelo Ordoqui, no trascendió demasiado, aunque se presupone que charlaron del 2015 y las proyecciones de las diferentes versiones del kirchnerismo de cara a los próximos comicios.
Sin demasiadas precisiones más, La Nueva Comuna emitió un reporte sobre la reunión:
Para los apasionados de la política siempre hay tema de conversación. Lo cierto es que el Ministro de Seguridad de la provincia Alejandro Granados estuvo en nuestra ciudad y aprovechó la ocasión para visitar a un viejo amigo y vecino de Necochea, el dirigente Roberto Porcaro.
Ocurrió en el mediodía de este martes 25 de noviembre. Concluido el acto de egreso de los 73 nuevos cadetes de policía que se desarrolló en el predio del Polideportivo Municipal, Granados rechazó varias invitaciones para almorzar y se fue directo al Barrio Médanos en automóvil. Lo esperaba Porcaro.
Charlaron casi dos horas, con una picada de por medio. Hablaron de política dentro del entorno de la amistad, un vínculo que mantienen desde hace muchos años.
¿Se puede improvisar la amistad o la lealtad? De ninguna manera. Las buenas relaciones se cultivan a través del tiempo, con una misma bandera, con proyectos en común, en la lucha codo a codo, con la lealtad como valor y recién a partir de allí florece ese vínculo de la amistad y el compañerismo.
Pero ¿para qué fue Granados a visitar a Porcaro? Poco se pudo saber de lo que se habló en el mediodía de este martes, aunque trascendió que en el temario de las conversaciones estuvo el 2015 y el compromiso para el camino de construcción política que requiere el próximo año electoral.
Tanto Granados como Porcaro son protagonistas y juegan en primera división desde hace tiempo. Ambos, defensores del proyecto/modelo kirchnerista desde la primera hora, se saben golpeados y hasta escaldados en innumerables hervores. Pero ellos no se cruzan de vereda, y de eso han dado sobradas muestras.
Las últimas encuestas señalan una base electoral favorable al Frente para la Victoria, por cierto sólida. Como contrapunto, una oposición de características centrífugas se expone con serias dificultades estructurales para mostrar un poco más que fotos con caras sonrientes.
Granados fue a visitar a su viejo amigo y luego de casi dos horas mandó a pedir el helicóptero oficial para dirigirse sin escalas hacia Balcarce donde el ministro tenía otras obligaciones.
El encuentro, todo un dato político. Continuará.
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