Como Cristina: La Muni ve un complot en su contra

En un rasgo claramente kirchnerista del gobierno municipal (Vidal estaba en Buenos Aires para participar de un acto de apoyo a Cristina Fernández de Kirchner cuando Valeria Ortiz fue asesinada), la primera respuesta no fue una autocrítica o alguna clase de replanteo de la política de seguridad, sino el señalamiento de alguna clase de motivación política detrás de los incidentes.

 

Así, cuando la marcha devino en incidentes primero en el despacho del intendente y luego en su casa, algún medio afín a la municipalidad lanzó el lineamiento de inmediato: supuestamente, había "infiltrados" en la marcha que se dedicaron a generar los desmanes.

 

Lo cierto es que la indignación de los vecinos era palpable y la posibilidad de que hubiera incidentes era muy alta. Sin embargo, desde la Municipalidad abonaron la versión del "complot" lanzando tiros por elevación prefiriendo no referirse al galopante fracaso de su alineación con el gobierno provincial de Daniel Scioli y su emergencia de seguridad con 10 mil nuevos policías, patrulleros, escuela de policía descentralizada, policía municipal, etcétera. 

 

En entrevista con Jorge Gómez para FM La Corte, el asesor en Protección Ciudadana de la Municipalidad, Hugo Rago, extendió la versión del municipio.

 

"Uno entiende a los familiares pero lo que no se entiende es el resto", dijo Rago, que enumeró la secuencia de robos e insultos durante los incidentes. "Al secretario privado del intendente (N del R: Carlos Hospitaleche) le robaron el celular, a mí intentaron robarme el mío", acusó el funcionario y agregó que "me golpearon e hice la denuncia".

 

"Muchos de los que estuvieron en las agresiones no tenían nada que ver con muchas de las caras que yo vi ayer a la noche. No sabemos por qué está direccionado esto así, no sabemos si tiene connotación política ni lo podemos direccionar", señaló el funcionario abonando a la teoría de una conspiración en contra del gobierno municipal.

Rago confirmó que "la prueba judicial la está trabajando la Fiscalía" aunque evitó dar mayores datos porque "puede entorpecer la investigación".

"Nosotros estamos totalmente a disposición de la familia", aseguró Rago. "Con la familia directa estaba todo bien, el tema fue toda esta incitación, que no sabemos quién lo organizó", reiteró el funcionario.

 

"Si venis a la municipalidad a reclamar justicia y me robás el celular es medio raro", sostuvo el asesor de seguridad del municipio y agregó que sobre los incidentes "hay una intervención de oficio de la fiscalía".

 

Para las 11:30 horas de este lunes 2-03 está prevista una conferencia de prensa del intendente José Luis Vidal. Se espera que el Ejecutivo de mayores precisiones sobre los pasos a seguir en materia de seguridad en el distrito.

 

 

Para la misma radio dieron sendas entrevistas el concejal radical Alberto Esnaola y el momista, presidente del bloque del Partido Fe, Arturo Rojas.

 

El radical había escrito en su cuenta de Facebook un texto de apoyo al intendente, lamentando la situación en general, aunque separando las aguas entre la cuestión política del reclamo de los vecinos.

 

"El ataque no es solo vil y cobarde, sino además que es incorrecto", dijo Esnaola. "La sociedad tiene que reclamar en paz", dijo el concejal desaprobando los incidentes. De cualquier manera, consideró que el intendente interino "se ha equivocado mucho" en materia de políticas de seguridad. Esnaola fue uno de los principales referentes del "no" a la policía municipal que el gobierno municipal impuso aún a pesar de la negativa en la consulta popular del año pasado.

 

Por su parte, el concejal Arturo Rojas destacó que en su partido (Fe) "estamos de acuerdo con la marcha pero no con el escrache". "Hay responsabilidades a nivel municipal pero también hay responsabilidad a nivel provincial y de otros estamentos, como la justicia", explicó el presidente del bloque momista.

"No estoy de acuerdo con ningun tipo de escrache ni al intendente ni a los funcionarios", recalcó el legislador que dijo que participó de la marcha al municipio pero que en cuanto vió que los ánimos comenzaban a caldearse decidió retirarse..