INTENTO DE FEMICIDIO EN EL 9 DE JULIO
A Ortega la Bonaerense le sacó el arma y se la devolvió a los tres meses
Marisa Astudillo recibió disparos en el tórax esta mañana luego de una discusión con su pareja, el policía Rubén Ortega. Al efectivo policial le habían quitado el arma reglamentaria por denuncias de violencia de género, pero la policía se la restituyó a los 3 meses.
El caso sacudió a la ciudad esta mañana, cuando se conoció que el policía Rubén Ortega le disparó tres veces a su ex mujer, Marisa Astudillo en el barrio 9 de Julio.
Ortega llegó a su casa a las 8 de la mañana luego de hacer adicionales y discutió con Astudillo. A las 8:30 le disparó con su arma reglamentaria tres veces dejándola gravemente herida. Ortega quedó inmediatamente detenido en la Comisaría 1ª.
Tras cuatro horas de intervención quirúrgica, Marisa, de 43 años, lucha este jueves por su vida en el Hospital Municipal Dr. Emilio Ferreyra. En el hospital estuvo la secretaria de Desarrollo Humano y Políticas Sociales de la Municipalidad, Jimena López.
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Intento de femicidio en Necochea: Un policía le disparó tres veces a su mujer en el barrio 9 de Julio. https://t.co/8Kdl1GsTQx
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"La víctima había sido atendida desde la Dirección de Políticas de Género, la dirección había denunciado y habíamos generado el dispositivo de protección, llevándola a un lugar que tenemos para alojar a personas y se hizo todo lo posible", destacó la funcionaria, que conversó con los hijos de Astudillo en el hospital.
"Es una situación compleja, como todas las situaciones de violencia de género, donde la víctima, como cualquier otra víctima de violencia de género va y viene con su pareja y se levanta el nivel de riesgo en el que están viviendo", explicó
La pareja tiene dos hijos, una chica 17 años y un varón de 21, y había estado separada por un tiempo hasta que en diciembre Astudillo decidió volver con Ortega.
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A raíz de las reiteradas denuncias por violencia de género, que merecieron la intervención de la Dirección de Políticas de Género, la Policía Bonaerense retiró el arma reglamentaria a Ortega... aunque se la devolvieron tres meses después.
"Insisto en la responsabilidad que le cabe a la institución a la que pertenecía este señor: se le devolvió un arma a los tres meses de haber sido sancionado porque ya había tenido denuncias de violencia anteriormente", explicó López. La decisión de restituir el arma al agresor excedió la responsabilidad municipal en este caso.
"Hay que empezar a entender que las penas deben endurecerse en este sentido y que hay que sensibilizar aún más a la población sobre qué es la violencia de género y cómo se comportan las víctimas", agregó.
Marisa ahora está internada en el hospital luego de una cirugía que fue compleja por la cantidad de sangre que perdió y porque los disparos dañaron varios órganos. Aunque se encuentra estabilizada, su evolución es incierta.
