Buscan a un argentino en Perú desaparecido desde el 4 de mayo

Familiares de Federico Farías, un argentino de 21 años, cuestionan los operativos de búsqueda y el accionar del consulado argentino en Cusco para dar con el paradero del joven que está desaparecido desde el 4 de mayo pasado, cuando emprendió una caminata para llegar a Machu Picchu, en Perú.

"La Cancillería nos abandonó", denunció Laura Bartual, la tía de Federico. Según contó, sólo una ONG peruana presta colaboración en la búsqueda de su sobrino, para la que ya viajaron hasta ese país el padre y un hermano de Federico.

"La cónsul adjunta Marina Quaranta nos dijo que había que esperar hasta el lunes para avanzar en la búsqueda, ya que los fines de semana no iba a haber trámites, y durante estos días no respondió a nuestros llamados. Tampoco se ocupó de que mi cuñado y mi sobrino tuvieran dónde alojarse", sostuvo Bartual.

Federico, que emprendió un viaje por Latinoamérica en febrero de 2016, se comunicó por última vez con su familia el 4 de mayo. Les contó que volvería a Machu Picchu, y aunque luego aparecieron su pasaporte, una mochila y su bolsa de dormir, no se supo más de su paradero.

Bartual contó que un turista argentino le hizo saber que el 5 de mayo había visto a un joven que cruzaba el río Vilcanota con un atado de ropa sostenido por encima de su cabeza y que fue arrastrado por la corriente."Vimos que aparentemente iba a salir hacia la orilla", dijo el testigo a la familia Farías.

"En Perú están buscando a un muerto, por eso no tienen apuro: nosotros buscamos a un vivo", enfatiza la madre de Federico,Alejandra Gaztelu. Según la tía, "un jefe de región policial en Lima está demorando la participación de rescatistas especializados en alta montaña, y entonces no hay ni helicópteros, ni drones, ni perros, ni personas con el conocimiento suficiente como para buscar a Federico".

"Abrieron la compuerta de la hidroeléctrica que esté en el camino que se supone que Federico iba a tomar para llegar al Machu Picchu: lo hicieron para que el fluido de agua fuera mucho, y de esa manera poder ver si aparecía algún cuerpo flotando. Como no apareció, las posibilidades de que Federico esté vivo son más concretas", advirtió la tía.

Y agregó: "Se necesita que los rescatistas especializados puedan trabajar con urgencia". Su cuñado y su sobrino, junto a un policía de la zona y a un rescatista no especializado, emprendieron una búsqueda: "Llegaron a un punto en el que los dos les dijeron a mi familia que no avanzarían porque no arriesgarían sus vidas".