Desplome del turismo en la provincia de Buenos Aires: Preocupación y desafíos para el sector

El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) encendió las alarmas al revelar un informe preocupante sobre la ocupación hotelera en septiembre de 2024, destacando una drástica caída interanual del 38,5% en la provincia de Buenos Aires. Estos números no solo ponen en vilo al sector turístico, sino que también reflejan una situación crítica que afecta la economía regional y nacional.

Un panorama desolador para la hotelería bonaerense

Durante septiembre, apenas 110 mil viajeros eligieron hospedarse en hoteles de la provincia, y casi la mitad de ellos optaron por Mar del Plata como destino. Este nivel de ocupación resulta alarmante, especialmente cuando se lo compara con otras regiones del país, donde la baja en el turismo osciló entre el 13% y el 17%, cifras igualmente preocupantes pero menos pronunciadas.

El informe también señala que la tasa promedio de ocupación hotelera en la provincia fue de apenas el 25%, aumentando ligeramente al 32,9% durante los fines de semana. Estos valores son especialmente desalentadores considerando que el sector turístico bonaerense aún se encuentra en proceso de recuperación tras el duro golpe que significó la pandemia de Covid-19.

Impacto en el turismo internacional

La caída no solo afecta al turismo local. Según los datos del INDEC, el turismo internacional también sufrió un marcado descenso. Durante septiembre de 2023, cerca de 3.000 extranjeros visitaron la provincia en el marco de la temporada primaveral. Sin embargo, este año la cifra se desplomó un 47,6%, atribuida a un "dólar planchado" que desalienta la competitividad frente a otros destinos, junto con el impacto de los constantes aumentos de precios en pesos.

Esta situación genera un doble desafío: por un lado, la necesidad de atraer nuevamente al turismo extranjero y, por otro, la urgencia de recuperar la confianza del público local, cuyo poder adquisitivo también ha sido erosionado en el contexto económico actual.

Un problema a nivel nacional

Aunque la provincia de Buenos Aires encabeza las cifras de caída en el turismo, el problema no es exclusivo de esta región. A nivel nacional, el INDEC reportó que durante septiembre de 2024 se registraron 3,4 millones de pernoctaciones en establecimientos hoteleros y parahoteleros, lo que representa una baja del 19,2% en comparación con el mismo mes del año anterior. De este total, el 80% correspondió a viajeros residentes, reflejando que el turismo internacional aún no recupera su vitalidad.

Además, la cantidad total de viajeros hospedados en todo el país fue de 1,5 millones, una disminución del 15% respecto a 2023. Este descenso se distribuye entre una baja del 14,9% en viajeros residentes y una del 15,7% en no residentes, lo que deja en evidencia la fragilidad del sector.

Menor tiempo de estadía: otro factor preocupante

Otro dato significativo que arroja el informe es la reducción en el tiempo de estadía promedio de los viajeros. En septiembre de 2024, los visitantes permanecieron en sus destinos 2,3 noches en promedio, un 4,9% menos que en el mismo período del año anterior. Este dato refleja un cambio en los hábitos de consumo turístico, posiblemente vinculado a las restricciones económicas que enfrentan las familias y los turistas individuales.

Desafíos para la recuperación

El desplome del turismo en la provincia de Buenos Aires no es un fenómeno aislado, sino parte de un contexto más amplio que involucra a todo el país. Sin embargo, las cifras bonaerenses destacan por su gravedad, lo que exige una respuesta contundente por parte de las autoridades y del sector empresarial.

Entre las estrategias necesarias se encuentran la creación de incentivos económicos para atraer a los turistas, la promoción de destinos emergentes dentro de la provincia y una mejora en la infraestructura hotelera para competir con otras regiones y países. Asimismo, resulta crucial estabilizar el contexto macroeconómico para recuperar la confianza de los viajeros, tanto nacionales como internacionales.

Con un panorama tan complejo, el turismo en Buenos Aires enfrenta un reto sin precedentes. La recuperación del sector será un proceso largo que dependerá de medidas coordinadas entre el Estado y los actores privados para revitalizar una de las actividades económicas más importantes del país.