CON CÁNCER EN LOS HUESOS
Cannabis medicinal: Cruzó toda la provincia para conseguir aceite de Necochea
Jorge es un productor agropecuario de Pergamino con cáncer en los huesos que cruzó toda la provincia para conseguir aceite de cannabis donado por la ONG de Cannabicultores de Necochea y Quequén. La mejoría que presenta a dos meses de haber iniciado el tratamiento sorprende hasta a los médicos.El caso de Jorge, de 58 años, no es menos que paradigmático: afectado por una grave enfermedad agotó los recursos de la medicina halopática convencional y al ver empeorada su condición recurrió a la alternativa que hoy le cambió la vida.
"Mirame como estoy, soy otra persona de cuando vine la primera vez", dijo sonriente Jorge a Cuatro Vientos en una entrevista en la Villa Balnearia.
Jorge recorrió en auto junto a su mujer y su hija los más de 600 kilometros que separan a Necochea de Pergamino (vive en un pueblo a 15 kilómetros de esa localidad) sólo para conseguir un aceite de cannabis medicinal que preparan artesanalmente cannabicultores necochenses. El encuentro se celebró con un asado en un quincho de la Villa Balnearia donde Jorge agasajó con un lechón de Pergamino a los cannabicultores.
Entró en contacto con la ONG necochense cuando descubrió la efectividad del aceite de cannabis para tratar el cáncer de huesos que padece desde hace dos años. El primer aceite que probó lo obtuvo este año luego de conocer el caso del tratamiento del Dr Marcelo Morante que aplicaba la medicina a un enfermo de cáncer que ya había perdido medio hígado y un riñon por la enfermedad.
"Fui a verlo a Ñato para pedirle que me dijera como conseguir el aceite y él me dió medio frasquito, pero cuando se me terminó me enteré de los cannabicultores de Necochea y no dudé y me vine", explicó Jorge.
La primera visita de Jorge a nuestra ciudad por el tema del aceite fue en septiembre, cuando la ONG brindó una charla sobre autocultivo. Quienes vieron a Jorge aquella vez y conocieron su caso, se sorprendieron frente a las mejorías que presenta ahora, dos meses después de recibir un tratamiento que consiste en apenas 6 gotas del aceite cada noche. "Las tomo antes de dormir y a la mañana me levanto hecho un avion", dijo contento.
Una de las mejorías más notables es que Jorge comenzó a ver cómo le crece nuevamente el cabello, perdido durante el tratamiento halopático que llevaba.
A raíz de un golpe mientras trabajaba en su campo (Jorge es productor agropecuario), una intervención quirúrgica devino en el descubrimiento de un cáncer de huesos que a cuatro meses de descubierto lo tenían "muerto en vida", como él mismo relata. "La gente en el pueblo no puede creer la mejoría. Yo estoy lavando el coche y me saludan y me dicen '¡Eh! ¡Cómo estás con la Mari!'", cuenta con una mezcla de felicidad y sorpresa. Para Jorge, la efectividad del tratamiento hace que valga la pena difundir su historia y pasar por alto los prejuicios sociales.
El camino al cannabis
