La Comuna recuperó la última concesión trucha de López

Se conoció esta semana un decreto con la firma del intendente Arturo Rojas y del secretario de Gobierno Jorge Martínez para disponer la caducidad de la unidad fiscal denominada Lago de los Cisnes Sector B (Ex El Arca).

La decisión partió de una severa irregularidad en la entrega de la concesión por parte de la gestión de Facundo López al mando de la Comuna.

Siguiendo la trayectoria de la concesión, el asunto estaba mal barajado de entrada y resultó llamativo que ni el Departamento Ejecutivo ni el Honorable Concejo Deliberante hayan detectado las irregularidades, por lo que se estima que la entrega fue más una devolución de favores políticos que un proceso viciado circunstancialmente por errores administrativos.

Sucede que la Comuna firmó con la sociedad Estación K2 Medios un contrato de concesión en abril de 2019, habiendo sido la empresa representada por Leandro Torcianti la única oferente para explotar comercialmente el complejo. El compromiso que constaba en el pliego de bases y condiciones era una inversión de más de 10 millones de pesos a lo largo de 22 módulos en una serie de trabajos detallados y aprobados específicamente con una finalidad en concreto.

Aunque el contrato estaba vigente, se detectó que la sociedad no tenía el objeto social que correspondía a un concesionario. La empresa tenía por objeto la "prestación y explotación de servicios de radiodifusión en todos sus niveles", pero no se había conformado para dedicarse a la explotación de unidades turísticas fiscales, algo que a criterio de la Dirección General de Concesiones de la municipalidad de Necochea resulta de "singular importancia".

Basicamente, se entregó la concesión a una empresa que no estaba dedicada al rubro desde el inicio mismo de sus actividades en agosto de 2016. Como el objeto social y otras irregularidades no se correspondían con las condiciones que debía tener el concesionario, la posibilidad de que la concesión se cayera hizo que la empresa cambiara su constitución y su nombre, cambiando el objeto social (agregándole la posibilidad de explotar el lugar y cambiando la composición de su directorio). 

La nueva empresa, Pilar del Bosque S.A., contaba con un nuevo directorio y un objeto social que se adecuaba a los requisitos, pero sólo después de haber ganado la concesión. Aunque la empresa adujo que el trámite de cambio de objeto social se inició antes de ganar la concesión, tal situación no fue acreditada al momento del proceso licitatorio.

Según consideraron en sus informes la Dirección General de Concesiones y la Secretaría de Legal y Técnica, sólo con esa irregularidad bastaba para hacer caducar la concesión, sin embargo, el concesionario con nuevo nombre (y con un intendente diferente) siguió trabajando y desoyó varias de las intimaciones que envió la Comuna para que detuviera los trabajos que venía realizando, en mayor medida porque se estaban llevando adelante obras que no constaban en los pliegos de concesión y por la carencia de seguros.

En el decreto (ver archivos relacionados) constan en los considerandos la serie de vicios detectados tras el proceso licitatorio y el posterior conflicto este verano con el concesionario que terminó con la decisión del Ejecutivo de dar por terminado el contrato.

Desde que se emitió el decreto (el 31-08 pasado) la empresa Pilar del Bosque tiene un plazo de 5 días para pagar a la Comuna 3.259.239 pesos en concepto de garantía de contrato bajo apercibimiento del inicio de posibles acciones legales. Además, se inhabilitó durante 5 años a la empresa para presentarse en nuevos procesos licitatorios.

Concesiones dudosas

No es la primer concesión de la gestión de Facundo López que llama la atención por lo turbio. En septiembre del 2018 el acto de apertura de sobres de la licitación de La Hélice tuvo que hacerse como un gran acto público frente a la sospecha de que al menos 3 funcionarios tenían representantes entre los 9 oferentes que declararon su intención de participar.

Cuando Cuatro Vientos reveló el dato, varios oferentes se retiraron y la licitación se llevó adelante bajo una mirada vigilante que pretendió garantizar una transparencia que había sido opacada por las sospechas.

Para esas semanas también se puso en cuestión la presunta intención del entonces secretario de Hacienda, Sebastián Serrano, de participar en la licitación del parador Kabryl, algo que tampoco terminó de cuajar cuando conoció la luz pública generando una fuerte molestia del jefe comunal con quien en ese entonces era pareja de su hermana y uno de sus  funcionarios de mayor confianza.

Así, la Municipalidad declaró la caducidad de la concesión y tomó posesión del predio, no sin antes vivir un nuevo sobresalto en el extenso historial de irregularidades que presentó en los últimos meses.

Intento de usurpación

La entrega del predio, que estaba prevista para el día de la emisión del decreto, finalmente se hizo efectiva ayer martes 1-09. Sin embargo, esta tarde la policía tuvo que intervenir y sacar a un joven que ya parecía querer asentarse en el lugar.

La policía informó que un empleado municipal de 49 años denunció que había en el buffet del lugar una serie de pertenencias de un sujeto de 19 años que estaba usurpando el edificio. Cuando llegó la policía, el sujeto amenazó a los agentes con un hacha de mano, pero la cosa no pasó a mayores y finalmente depuso su actitud.

Ahora por ese episodio interviene la UFI Nº 1 y el sujeto fue detenido y trasladado a la Comisaría.