Aumento de coletivos: "Si el servicio sigue igual, el precio tiene que mantenerse igual"

El rechazo a la solicitud de las empresas de transporte urbano de pasajeros de llevar el boleto plano a 75 pesos una vez más puso a la ciudad en un debate que lleva años yendo hacia ningún lugar: los aumentos sistemáticos del cuadro tarifario persiguen la inflación y responden a demandas de los prestatarios del servicio que más tienen que mas se parece a negociación casi extorsiva que a un tratamiento cabal de las posibles soluciones a este problema.

Todos los años las empresas de colectivos solicitan aumentos que son considerados desmedidos, el tema es tratado en el HCD y se termina otorgando un aumento muy por debajo de lo solicitado por la empresa. A principios del año pasado la empresa solicitaba un cuadro tarifario que llevara el boleto plano a 88 pesos cuando en ese momento estaba a 23,50. Finalmente el aumento fue a 28 pesos para el boleto plano. 

Este año, de esos 28 pesos se solicitó subir a 75, un aumento considerablemente menor al que las empresas pedían el año pasado, pero igualmente desproporcionado y considerado incluso como "un disparate" por algunos concejales consultados por este diario. 

"La empresa hace un estudio de costos, que le da que el boleto plano debería estar en ese valor, por la baja del uso a causa  del Covid, el cierre de paritarias en un 30% e inflación", señaló la concejal Eugenia Vallota (PRO), presidente de la Comisión de Transporte del HCD y quien ofició como una suerte de vocera del reclamo de la compañía de transportes en declaraciones radiales esta mañana.

La concejal macrista destacó además que en el mientras tanto, las quejas de los usuarios siguen siendo las mismas: falta de higiene de algunas unidades, el trato de algunos choferes para con los pasajeros, mal estado de las garitas en las paradas y cuestiones que atañen a la naturaleza del servicio. Otras faltas del servicio, como la obligatoriedad de la empresa de tener unidades con sistemas de ascenso y descenso de discapacitados sencillamente ni parecen ser consideradas.

Cada audiencia pública que se realiza para cada aumento los vecinos llevan los mismos reclamos, la empresa se compromete a cumplir cierta parte de lo que se le reclama, el servicio aumenta el boleto y luego empeora, se vuelve a pedir aumento, otra vez se escuchan las quejas y nuevamente un compromiso en una historia de nunca acabar. Intgentando sin éxito cerrar el círculo, flota siempre la idea de generar una ecuación que regule el cuadro tarifario según distintas variables, aunque los concejales no han llegado a un acuerdo.

La polinómica

"Si el servicio sigue igual, el precio tiene que mantenerse igual, yo pagaría el precio que está ahora", respondió el concejal Ignacio Barrena (FdT-UC) ante la consulta de este diario. "Si me apuran en la negociación, es eso", agregó, esquivando en realidad un estimativo que, por lo pronto, consideraría "irresponsable" arriesgar hasta tanto no se avance en el proceso, con la correspondiente revisión de las cuentas.

Para Barrena la solución al problema está en una fórmula polínómica compuesta por las diferentes variables que configuran el costo del pasaje. "Hay que discutir cómo se compone el precio: para nosotros hay que tener una fórmula polinómica que de una propuesta al Concejo y el Concejo, no el Ejecutivo, defina cuál es el precio a propuesta de esa fórmula polinómica", contó Barrena.

La fórmula podría estar compuesta por "salarios, precios de insumos como gomas y aceite y después, por otra parte el precio del gas oil que sean ponderados de diferente manera" formando así "un valor de referencia para discutirla, no es que lo que da la fórmula es lo que hay que darle a la empresa".

"Para nosotros tiene que haber una ordenanza que estipule una propuesta con esa fórmula", sentenció Barrena, quien además recordó que el tema se complejiza aún más cuando se recuerda el volumen de subsidios que entrega el gobierno a las empresas de transporte público para garantizar su funcionamiento como servicio público.

"Disparate"

"Claramente lo de los 75 pesos es un disparate, pero nosotras vamos a tomar una decisión cuando se realicen las audiencias públicas y podamos escuchar a los usuarios del servicio, que han venido a lo largo de estos últimos años que se realizan audiencias públicas, reclamando cuestiones que aún no se han solucionado", señaló la concejal Graciana Maizzani (UCR), consultada por este medio.

La concejal recordó los usuarios reclaman que "hay unidades que no tienen la limpieza necesaria, unidades que se llueven, que no tienen rampa para discapacitados, que me parece lo más importante".  

Si bien Maizzani reconoció la propuesta de la creación de una fórmula polinómica para la creación del cuadro tarifario, señaló que "la formula polinómica es una opción que se viene manejando hace rato pero nunca hubo acuerdo".

En igual sentido se refirió el concejal Alejandro Issin (Necochea Federal), quien consideró "inalcanzable" la propuesta de la empresa y consideró que antes de definir alguna clase de número para el aumento "esperaremos la audiencia pública antes de definir nosotros". "Queremos oír todas las campanas", dijo el concejal del bloque que conforma junto al concejal Maximiliano Delfino.

La audiencia

Ahora con la propuesta de las compañías de transportes sobre la mesa, el tema será debatido por los concejales en comisiones. Es atributo del poder legislativo establecer los cuadros tarifarios de los servicios públicos, por lo que el proceso continuará con una audiencia pública.

El HCD anunció la semana pasada que la audiencia pública para el aumento será el próximo 22 de febrero desde las 19 horas en la sala de sesiones del cuerpo legislativo. Los interesados tienen tiempo para inscribirse para intervenir en la audiencia hasta 24 horas antes de su realizacion.