Nueva licitación para La Hélice y Polo Ranch: Dos concesiones a 25 años a medida del Ejecutivo
El Honorable Concejo Deliberante (HCD) trató esta tarde los expedientes para llamar a licitación a dos concesiones de balnearios que actualmente se encuentran sin ocupar en Necochea y Quequén.
Se trató de las concesiones para el ex balneario Polo Ranch en Necochea y el ex Complejo La Hélice en Quequén, a través de dos proyectos separados de la subsecretaría de Ordenamiento Urbano por un lado y de la Dirección de Concesiones por el otro. La intención del Ejecutivo es comenzar a mover los trámites aspirando llegar al verano con alguna clase de funcionamiento en dos espacios hoy desocupados.
Al respecto se desarrolló un debate que se prolongó durante la sesión con ciertas dudas que planteó la oposición, comenzando por la celeridad inusitada que buscó darle el Ejecutivo a dos concesiones que serían entregadas por 25 años, extensibles a 32.
El Ejecutivo buscó acelerar la gestión por un lado y hacer atractiva la oferta por otro, proponiendo un canon que pareció un poco bajo a los opositores, lo que resultó el disparador de un extenso debate entre los concejales oficialistas que querían aprobar la licitación y los que buscaban que se pasara a comisión para seguir evaluándolo.
En el inicio, el concejal de Nueva Necochea, Bartolomé Zubillaga hizo un completo repaso de las condiciones del llamado a licitación puesto a consideración del Concejo.
"Es una concesión de derecho de uso, remodelación, puesta en valor y mantenimiento y explotación, con un aporte en obras que luego serán propiedad de la municipalidad de acuerdo a lo que dice el pliego", explicó el concejal oficialista, que preside la Comisión de Política Económica y Finanzas del HCD.
"El plazo por el cuál se estaría otorgando la concesión es 25 años con 7 años prorrogables, estableciéndose un cánon base de 15 módulos. Un módulo equivale a un sueldo básico de empleado municipal de servicios categoría 1, 30 horas, ingresante, lo que al 31 de mayo significaría un canon base de 308.448 pesos", señaló el concejal y agregó: "Obviamente que este valor se va a ajustar por el simple aumento del salario año tras año y recordemos que es un cánon base, es decir que para la licitación se puede presentar más".
"El cánon va a ser pagadero de forma anual el 31 de enero de cada año y recordemos que el 10% del cánon tal cual está establecido, va a ir destinado al Fondo de Sostenimiento de las Bibliotecas Populares. Ese 10% también se va a abonar dentro del período de gracia que contiene esta licitación. El período de gracia está establecido en 5 temporadas mientras que la temporada mínima de explotación es de 4 meses al año, mínima, que va del 1 de diciembre al 31 de marzo", puntualizó el edil.
Está previsto que para la evaluación de las ofertas que se presenten se conforme una comisión evaluadora para que analice las ofertas con un criterio de interés público y turístico de cada propuesta.
"En cuanto a la propuesta técnica lo que se va a tomar en cuenta son el proyecto arquitectónico, cuáles son los materiales que se utilicen, la seguridad e iluminación interior que tengan, el tipo de inversión en obra que se quiere hacer y en relación a la propuesta económica, no solamente se tomará por supuesto el cánon, sino el monto de inversión en obras con relación a la propuesta que haya sido referida y la sustentabilidad económica del proyecto para evitar malas experiencias que ya hemos tenido", detalló Zubillaga.
"Dudas razonables"
El eje de la oposición al proyecto tuvo que ver con la relación entre los tiempos que otorgó el Ejecutivo al Concejo para considerar el proyecto, que llegó a manos de los concejales el lunes pasado, y las implicancias a largo plazo en la entrega de dos importantes concesiones turísticas del distrito. Para los opositores, la cuestión debía ser considerada más en profundidad, mientras que para el oficialismo y sus aliados la cuestión tenía que aprobarse sin más y dejar el asunto en manos del Ejecutivo.
El concejal Ignacio Barrena (FdT) observó la celeridad con la que el Ejecutivo buscó que se aprobara el proyecto. "La verdad es que me cuesta entender como podemos pensar en votar un pliego para entregar 32 años dos concesiones importantísimas en menos de 72 horas", señaló el concejal kirchnerista, que coincidió con "todo lo que se ha planteado, con las dudas razonables, racionales que hay sobre este proyecto". El concejal se refería a los montos previstos para la base de la licitación, que habían sido cuestionados previamente, aun cuando Zubillaga ya había explicado que se trataba de una propuesta base.
El concejal consideró que el proyecto podía pasar a comisión para tomarse el tiempo de estudiarlo "y aprobarlo en la próxima sesión". Barrena consideró que por el plazo que establecía la concesión, el tema "merecería un poco más de tratamiento".
En el mismo sentido se expresaron otros concejales, como la concejal Felicitas Cabretón, que señaló "acá se está planteando dar una concesión por encima de una gestión y nos excede a nosotros en nuestro mandato. Lo que hoy nosotros vamos a dar excede los mandatos y las gestiones".
"Las cuestiones que marcaron los concejales anteriores son ciertas y hay otras que son fundamentales y que este departamento Ejecutivo y los concejales oficialistas se niegan sistemáticamente a tener en cuenta: los pliegos de concesiones de hoy, como decía la concejal Maizzani, si se aprueban, quienes tengan esa concesión van a poder hacer dentro de la unidad turística fiscal lo que quieran", indicó Cabretón. Según la concejal radical, la licitación no tendría en cuenta ni la ley de usos de costas que "da los parámetros bajo los cuales se puede intervenir en esas zonas"
Encendida defensa
En el debate la concejal macrista Eugenia Vallota mostró una vez más la cercanía entre el PRO y el vecinalismo de Nueva Necochea, que en campaña ya ha cerrado filas lo más lejos posible del kirchnerismo.
En su encendida defensa, Vallota dejó en claro que su perspectiva considera antes la inmediatez de resolver la cuestión porque "nuestra costa es un desastre", antes que las consideraciones como, por ejemplo, de respeto a la ley de Usos de Costas mencionada por Cabretón.
"¿Cuál es el momento adecuado que tenemos que dar en discusión? No lo sé, yo creo que para esta temporada hay que darle la posibilidad que si hay inversionistas, vengan, presenten un proyecto, que será evaluado por el Departamento Ejecutivo", dijo sencillamente la concejal macrista cerrando la cuestión.
"Entiendo que hay parámetros pero, a ver, la costa de Cariló, la Costa de Villa Gessell, no es comparable a la nuestra... ¿cuándo vamos a cambiar esa mirada que tenemos de que 'esto no hay que hacerlo'?", dijo. "Que hagan un proyecto y después el Departamento Ejecutivo de acuerdo a la normativa vigente, de acuerdo al pliego, que tiene carácter general y carácter específico que determina cuáles son los servicios obligatorios y cuáles no...", agregó.
"Pero si no avanzamos en la posibilidad de dar, hacer un llamado a licitación, estar presente como cuerpo deliberativo en el momento de los pliegos, que se abran los sobres y estar constantemente revisando... ser parte de la comisión evaluadora, como se hizo con el Casino... y en ese sentido, avanzar de una vez por todas, porque seguimos demorando incansablemente el crecimiento y la mejora de la situación costera de nuestra ciudad", sostuvo.
Para cerrar, Vallota usó el ya conocido concepto de "la ciudad del no". "Todo es no: hay que hacer una vereda, no. Hay que llamar a licitación, no. todo no. Todo es no. Bueno, yo no voy a estar dentro de ese no. Así que voy a acompañar los dos pliegos para llamar a licitación y espero y deseo que haya muchos inversores que realmente quieran invertir en nuestra costa a pesar del estado de abandono en que se encuentra".
A pesar de la perspectiva histórica y las dudas planteadas sobre las atribuciones que finalmente recaerán sobre el Ejecutivo para determinar las condiciones de ejecución de los proyectos, ambas concesiones fueron debatidas en conjunto, votadas por separado y aprobadas por una mayoría de 11 votos a favor y 9 en contra.
