La Municipalidad plantea duplicar sus gastos en 2023

Se conoció en las últimas horas un esbozo del proyecto de presupuesto que la gestión del intendente Arturo Rojas evalúa presentar al Concejo Deliberante para el ejercicio del 2022, con un cálculo que directamente duplica los gastos previstos para este año.

Según trascendió, Secretaría de Hacienda y Finanzas Públicas, a cargo de Graciela Mamelucco, está terminando el proyecto que se estima en poco más de 12.000 millones de pesos, practicamente el doble de este año, aprobado en casi 5.900 millones.

El Ejecutivo tiene tiempo hasta el 15 de diciembre para presentar la herramienta al Concejo, donde se estima que sería aprobado sin mayor debate en virtud a la actitud que ha tomado la gestión Rojas de evitar cualquier clase de consenso, imponiendo su voluntad en la mayoría de las iniciativas llevadas al Concejo en los últimos 3 años.

Antes del presupuesto el Ejecutivo logró aprobar también casi sin debate un nuevo aumento de tasas que alcanza un promedio del 75% en la mayoría de las categorías, lo que llegó a sumarse a una serie initerrumpida de aumentos que ha desarrollado la gestión de Arturo Rojas desde que asumió el gobierno municipal. Para aprobar las tasas, Rojas sumó un nuevo aliado en el Concejo con Rafael Iácono, concejal vinculado a la CGT que de esa manera quedó vinculado al oficialismo para cuando sean tratados futuros proyectos.

Se espera que, como ha sido en los años anteriores, el presupuesto termine siendo subejecutado, brindando la oportunidad al Ejecutivo de "mostrar" una austeridad y eficiencia en el gasto que no se corresponde con la práctica diaria: el gasto político del intendente ha sido una de sus grandes características, financiando su aparato de propaganda con exageradas pautas oficiales, organizando eventos multimillonarios con sospechas de sobreprecios, agrandando la planta política llegando a un nivel histórico y usando todos los recursos del Estado con la única finalidad de promover la campaña reelectoral de Rojas y su vecinalismo de funcionarios municipales.

Producto de la subejecución en diferentes áreas, es decir, luego de presentar presupuestos exagerados, el oficialismo no ha tenido reparo alguno en presentar ese maniqueo como una virtud de gestión ordenada y un "superávit presupuestario" dibujado para la propaganda.

Desafortunadamente, el oficialismo no ha mostrado mayor interés en revisar sus presupuestos y se ha dedicado a imponerlos sin mayor debate, dejando a los concejales de la oposición casi como testigos de los manejos del intendente, que por lo pronto se presenta como el mayor responsable de una situación que sólo se ve bien a través del filtro de los medios oficialistas y sus voceros.

Por lo pronto, lo poco que se sabe sobre el proyecto fue filtrado por el propio Ejecutivo al diario en papel local para tratar de instalar un relato en el que las prioridades están basadas en contar que el mayor gasto es en personal (algo que es así practicamente desde siempre) y que la mayor partida de recursos es en el área de salud (que también suele ser la mayor partida presupuestaria).

La elección del relato no es arbitraria, después de todo, la gestión Rojas ha usado una y otra vez a los municipales como moneda de cambio para cualquier negociación mientras que el área de salud, sometida a un fuerte recorte de recursos y una completa desatención en múltiples áreas, suele estar en el centro de las miradas, sobre todo en año electoral.

De lo dicho, la información oficial es más que nada un relato de campaña del que poco puede saberse realmente, tal como ha sido la práctica de falta de transparencia de la gestión Rojas, con múltiples escándalos (asado en pandemia, vacunaciones VIP, robo de extras en el hospital, etc) que ha tratado de ocultar con ingentes gastos en propaganda. Habrá que esperar hasta el 15 de diciembre para observar el proyecto real y que se le realicen las observaciones pertinentes, si es que el oficialismo realmente lo permite.