Bacheo por 20 millones: La Muni desvía fondos de una obra de Nación para hacer campaña electoral para el intendente

Prácticamente a lo largo de toda la gestión del intendente Arturo Rojas se han estado usando los fondos enviados por la Nación y la Provincia para ejecutar cualquier clase de trabajo que sea vistoso y que puede ser presentado a la sociedad como parte de un paquete de tareas que se exhiben como "obras que transforman". Aunque en su mayoría se trata de pequeñas tareas de mantenimiento que la propaganda se encarga de magnificar, la Comuna ha evitado mencionar (o más bien trata de mantener lo más velado posible) el origen de los fondos, casi siempre de origen nacional y, más que nada, provincial.

Así, cuestiones básicas como el recambio de luminarias en avenidas o el reacondicionamiento de un sector de la Plaza Dardo Rocha han sido presentadas como grandes gestiones que en rigor de verdad son mucho más vistosas que urgentes y mucho más favorables a una campaña electoral que a las necesidades de los vecinos. La elección de esas obras fue propuesta por el gobierno, pero la elección de la prioridad para las mismas fue entera responsabilidad de la gestión del intendente Rojas, enfocado principalmente en mostrar cosas vistosas para impulsar sus intenciones reelectorales.

Como el tema tiene obvios ribetes políticos, la gestión no reconoce el aporte de un gobierno provincial del que quiere despegarse y usa los recursos de manera discrecional, dejando a medias varias de las tareas una vez que se instaló en la Comunidad la idea de ejecución.

Siguiendo ese curso, las obras más importantes presentadas en los 3 años que lleva de gestión el intendente Rojas parecen haber quedado truncas en sus momentos finales. Un ejemplo claro de esa situación ha sido la vereda de avenida 2, que fue presentada en marzo como un "antes y un después" del frente costero, cuando se iniciaba el tercer y último tramo de la obra, pero que al día de hoy no ha conocido fecha de culminación y se presenta abandonada en el sector que va desde calle 71 a 67.

Otros ejemplos pueden verse en el CAPS Dr Carlos Fucile, que lleva dos años de anuncios y actualmente está sin terminar, situación que se agravó esta semana cuando se conoció la orden de desalojo del edificio de la VIlla Balnearia donde actualmente funciona el centro de salud. La Municipalidad no pagó los alquileres y ordenaron desalojar el lugar para el próximo 12 de diciembre, aunque el CAPS que se levanta en calle 71 y 4 no ha sido terminado y así, la Villa Balnearia arrancará la temporada sin un centro de salud disponible.

Acotación: la situación del CAPS Fucile se complementa además con la inactividad en el la posta sanitaria que instaló la Comuna, con fondos de UATRE como parte de pago por el camping que gestiona en el Parque Miguel Lillo. La posta, que se presentó muy estéticamente incluso con enormes carteles sobre avenida 10 de manera contigua al camping del Sindicato de Camioneros, fue presentado con toda la pompa por funcionarios del Ejecutivo y concejales oficialistas en agosto, y hasta el momento no ha sido puesto en funciones, siguiendo el tono de la profundización de la crisis sanitaria que la gestión no ha podido resolver ni gobernando por decreto.

Es con estos y otros antecedentes que ahora la municipalidad ha anunciado que realizará tareas de bacheo en 5 puntos de Necochea y Quequén otorgando una licitación que se ve algo forzada a la empresa Hidracil. Es en el propio decreto que otorga la licitación que la Comuna reconoce que el dinero que usará para los trabajos procede de partidas que en realidad son para terminar la urbanización del Barrio Los Malvones, otra de las obras con financiación del gobierno que ya se encuentra muy fuera de término y que parece que no fuera a terminarse.

El decreto 3151 firmado por el intendente Arturo Rojas y el secretario de Obras y Servicios Públicos, Adrián Furno, dispuso el pasado 13 de octubre el uso de fondos nacionales para la urbanización del Barrio Los Malvones por casi 20 millones de pesos para tareas de reparación de baches que anunció este martes en su web oficial.

La urbanización en el Barrio Los Malvones contaba con una inversión de 70 millones de pesos otorgada a tres oferentes diferentes encargadas de las diferentes partes que consistían en iluminación, cordón cuneta, cloacas, agua corriente y una pequeña plaza en uno de los barrios más postergados de la ciudad. Más allá de su atraso y la posibilidad de que no se terminen las tareas prometidas (aún cuando incluso se aprobaron ampliaciones del presupuesto de la obra por la inflación) los trabajos presentan serios defectos constructivos que están provocando anegamientos cada vez que se produce una lluvia. Como la obra tiene asidero en la alianza del intendente Rojas con el peronismo local, no se han escuchado voces críticas al respecto de esa situación.

Para justificar su uso de fondos desviado, el decreto forzó su uso discrecional adjudicando de manera directa los trabajos a Hidracil simulando la presentación de un solo oferente al llamado. Aunque el llamado tuvo también la presentación de la omnipresente Vícoli SRL (de vínculos directos con funcionarios de la gestión, por no decir que uno de sus funcionarios es el dueño en las sombras de la constructora más beneficiada por las licitaciones) el incumplimiento de algún detalle justificó que la Comuna adjudicara directamente la licitación a la única empresa que cumplía con los requisitos.

En otras palabras, la Comuna se las arregló para entregar directamente la obra salteándose el reglamento usando considerandos llenos de una jerga legal que argumentaba en favor de de la decisión sin siquiera ser sometida al procedimiento de control del Concejo Deliberante.

Es en ese contexto que ahora parte de los fondos destinados al barrio Los Malvones serán usados para la campaña del intendente Rojas en un procedimiento forzado y con puntos oscuros que se verán reflejados con seguridad cuando el Tribunal de Cuentas realice su evaluación. Mientras tanto, el bacheo con fondos nacionales sirve a las intenciones electorales del intendente Rojas visibilizando gestiones y tareas de mantenimiento como las famosas "obras que transforman" mientras se utilizan recursos destinados a obras queen estos terminos es probable que nunca se terminen, perjudicando así a los sectores más postergados de la ciudad.