Pagatelo vos... de nuevo: La Muni ahora pretende asfaltar una avenida con el pago de 30 frentistas

En la Nueva Necochea que plantea el intendente Arturo Rojas con "obras que transforman" y demás slogans proselitistas que lleva adelante para buscar la reelección, la propaganda siempre ha sido muy cuidadosa de no revelar su verdadero espíritu privatista (con una amplia similitud a las fracasadas políticas menemistas en los años 90's) y, sobre todo, su interpretación de la función pública como un gerenciamiento privado destinado mayormente a la facilitación de negocios.

En ese esquema, la mirada que tiene sobre la prestación de servicios que debe dar la Comuna a cambio del pago solidario de tasas urbanas está reducida a la pintura de cordones y sendas peatonales, la instalación de cartelería y luminarias y el mantenimiento de espacios públicos como el eje central de todas las políticas. En los tres años que lleva de gobierno, el intendente Rojas no ha podido llevar adelante ni una de todas sus promesas ni abordar ninguna de las grandes problemáticas de la ciudad, presentando las tareas de mantenimiento de la ciudad allí donde su carácter estético pudiera ser capitalizado electoralmente.

Hasta el momento la gestión actual no ha podido mostrar ni una sola cuadra de asfalto nueva en la ciudad (a excepción de la "bicisenda" paralela a la avenida 10 frente al Parque Miguel Lillo) y al día de hoy sigue refritando la promesa de asfaltar 5 cuadras de Avenida 58, que según el secretario de Obras Públicas Adrián Furno estaría "pronta a comenzar".

Como ha sido a lo largo de los últimos años, las precisiones no abundan y la información sobre cuándo podrían comenzarse los trabajos es incierta. Teniendo en cuenta que se trata de un año en el que el intendente irá detrás de su reelección, se espera que la obra sea mostrada varias veces con el pasar de los meses por la propaganda municipal (son 128 millones de pesos en publicidad para este año).

Y aunque no se conoce exactamente cuándo empezarían los trabajos o siquiera si van a concretarse realmente, el secretario Furno amplió la promesa en recientes declaraciones radiales: en una entrevista concedida a FM De la Costa Furno señaló que "queremos intentar la pavimentación de la 91 entre 42 y 58, que sería clave para cerrar el circuito y conectar con pavimento al Parque con el centro de la ciudad”.

Frentistas pagando de nuevo

A continuación, el funcionario lanzó la alternativa que, de tan novedosa, raya lo absurdo: “Como hasta ahora no hay financiamiento externo para esto, la idea que analizamos con el intendente Rojas es hacerlo con fondos propios del municipio, pero con una contribución de los vecinos de ese trayecto, es decir al igual que en otros barrios para que paguen parte de la obra, aunque seguramente en un índice menor al 50% del costo total. Se hará un relevamiento de esos frentistas y se los convocará para entre todos ver la factibilidad…”.

De avanzar con la idea, por primera vez en la historia de la ciudad un puñado de vecinos (en ese tramo no habrá más de 30 frentistas) serían los financistas del asfaltado de un tramo de avenida de 8 cuadras, algo que sonaría surrealista si no estuviera enmarcado en una intención electoral necesitada de anunciar obras y proyectos donde hay poco y nada.

Vale decirlo, en los 4 años de la denostada gestión del ex intendente Facundo López, se asfaltaron tres tramos de avenidas (10 y 75 en Necochea y la 554 en Quequén) y durante la gestión interina de José Luis Vidal se hizo el recapado de todas las calles de la Villa Balnearia, lo que pone en perspectiva lo pobre que ha sido la gestión Rojas en esta clase de obras.

El pago de los vecinos para la obtención de servicios durante la actual gestión municipal no es nueva: además de imponer aumentos de tasas sostenidos cada año de gestión, la Comuna se limitó a gestionar entre una empresa colocadora y grupos de frentistas el recambio de luminarias por toda la ciudad. Así, la iluminación de cada cuadra en la ciudad varía según si fueron pagadas o no por los grupos de frentistas. Un sistema similar se ofreció también para el relleno de calles de tierra, mostrando una vez más que los vecinos pagan dos veces o más por cada servicio que obtienen.

También el agua

A esa clase de pagos por los servicios podría sumarse pronto el consumo de agua. El propio funcionario anunció en la misma entrevista que ya se está evaluando cobrar en la ciudad el uso del recurso. Por lo pronto, sería para los grandes consumidores como la Usina, el Puerto e industrias o comercios que hacen un alto consumo del recurso. "Se les pondrá medidores para determinar lo que consumen y cobrarles de acuerdo a ello”, señaló Furno.

La idea parte de un viejo proyecto que el propio Rojas presentó cuando era concejal, el PROMURSA, cuyo eje central consistía en cobrar el agua para renovar la red. Este año no han habido mayores quejas por cortes de agua como en veranos anteriores, en los que la Comuna llegó a acusar de la situación a la sequía para ocultar la mentira flagrante que presentó en la campaña del 2021, cuando aseguraba que había instalado nuevos pozos que supuestamente habían terminado con el problema.

Para tratar de justificar la intención de cobrar el agua el funcionario presentó el gasto en la materia y señaló que "en el presupuesto de este año tenemos un cálculo de 30 millones para obras de agua y cloacas en varios barrios, que se harán este año, ente ellos el colector para el barrio Los Eucaliptus de Quequén”. Teniendo en cuenta la importancia del problema, la cifra mencionada no impresiona, más si se tiene en cuenta que el importe mencionado es menos de un cuarto de lo que se destinará a publicidad y propaganda para este año.