El Ejecutivo insiste con nuevos aumentos de tasas y amenaza con la suspensión de servicios
El oficialismo insistirá este lunes con la intención del Departamento Ejecutivo de imponer dos nuevos aumentos de tasas ajustados por el Índice de Precios al Consumidor. De conseguir la aprobación del Concejo Deliberante, que se muestra bastante reticente a la idea, se sumarán a los dos aumentos ya dispuestos para este año desde noviembre del año pasado.
Este lunes la Comisión de Política Económica y Finanzas Públicas del Honorable Concejo Deliberante seguirá analizando la propuesta de los nuevos ajustes en las tasas, propuesta que ya rechazó cuando otorgó el segundo aumento del año por un 40%. El oficialismo sostiene que la inflación hizo estragos en las cuentas municipales, casi impidiendo la continuidad de los servicios básicos, como lo explicó al diario local recientemente el presidente de la Comisión, Bartolomé Zubillaga (NN).
"Si las tasas se cobran mal, poco, o no se cobraran, no se podrían brindar los servicios como por ejemplo el de la atención en los hospitales, centros de salud y la recolección de basura", advirtió el concejal, vocero de las intenciones permanentes de la gestión municipal de imponer aumentos en las tasas. La amenaza implícita de las declaraciones de Zubillaga llega en la previa al encuentro de concejales de este lunes.
Y si antes los méritos de las "cuentas ordenadas" eran del municipio, hoy la culpa se le endilga directamente al gobierno provincial: "En la administración municipal tenemos un grave problema que es el de los fondos que provienen de provincia, ya que alcanzan cada vez menos y empezamos cada vez más a depender de los recursos municipales".
El gobierno provincial dispuso el envío de fondos de libre disponibilidad para el municipio y recientemente se firmó un convenio para que las gestiones entre la provincia y el municipio puedan ser controladas electrónicamente.
Recientemente el Concejo Deliberante rechazó la rendición de cuentas del 2023, sesión en la que la oposición recordó al Ejecutivo que durante el año pasado se usaron fondos municipales para pagar la campaña electoral que dio la reelección al intendente. Lejos de producir un escándalo, el rechazo de la rendición por esta razón no generó mayor atención y actualmente el debate se centra en si se aumenta por tercera y cuarta vez las tasas en el año.
En este contexto, la recaudación sigue tan baja como en los peores momentos de la pasada gestión de Facundo López, que estaba en un promedio que rondaba entre el 45 y el 50% de los contribuyentes. Para el caso de Rojas, se registra un 50% de cobrabilidad aunque ese número pronto podría bajar. Mientras tanto, la Comuna invierte esfuerzos para cobrar con intimaciones por deudas de menos de 100 mil pesos y con quitas de hasta el 80% de los intereses en el marco de una moratoria que se extiende hasta el 31 de julio.
La idea de la Comuna es ajustar las tasas en dos tramos: el primero de agosto a octubre, con el índice de precios que arroje el 31 de mayo; y el segundo, para los dos últimos meses del año, basados en el índice del 31 de agosto. Y aún así, el oficialismo asegura que ni siquiera se trata de todo el aumento que el Ejecutivo desearía conseguir: "No es el aumento que quisiéramos porque con todo esto igual no vamos a llegar a cubrir la inflación que tenemos pronosticada para este año, que es del 150% o 150%, pero bueno, ya venimos perdiendo contínuamente".
Señalan a la oposición
Abriendo un poco el paraguas, luego de los señalamientos sobre el gobierno provincial, Zubillaga también cargó las tintas sobre la oposición en el Concejo Deliberante.
"La oposición reconoce que hay un problema pero no hemos tenido respuestas ni propuestas", dijo Zubillaga. "Ellos dicen que le cuidan el bolsillo al vecino, pero cometen el error de entender que esto es un impuesto y esto es una tasa. Vos cuando pagás un impuesto provincial, no sabés dónde va, en cambio con las tasas si, vos estás viendo que se están prestando los servicios", argumentó el concejal oficialista.
En el pasado la mayoría automática con la que contaba el oficialismo en el Concejo propició una marcada falta de diálogo en la que la oposición denunciaba no sólo falta de respuestas del Ejecutivo, sino atropellos en los que no se respetaban algunos tiempos para poder estudiar los expedientes o se convocaban a sesiones intempestivas para dar tratamiento a los temas aprovechando que estaban los votos, convirtiendo al Concejo en una "escribanía" que legitimaba cualquier propuesta del Ejecutivo.
Ahora que la mayoría cambió y el Ejecutivo está obligado a negociar con los concejales, las acusaciones oficialistas apuntan más a la responsabilidad ajena que a la autocrítica, algo que probablemente no aporte demasiado en la necesidad de encontrar consensos para enfrentar la situación. Luego de la reunión de este lunes habrá más datos sobre la futura financiación del Estado Municipal.