CoVID19 en la zona: Aseguran que Tres arroyos está al borde del colapso

En la localidad de Tres Arroyos el panorama que impone el avance del CoVID19 está planteando algunos parámetros que quizá hagan que el distrito deba imponer nuevas restricciones si el gobierno provincial decide que haya un retroceso de fases de la cuarentena.

El concejal del Frente de Todos en Tres Arroyos, Martín Garate, señaló que "la lectura que hacemos es negativa". "Evidentemente, hay un crecimiento muy importante de los casos. Yo creo que eso va a provocar que haya un retroceso de fase inminente", indicó.

El concejal consideró que "hay que tomar alguna medida. Se lo dije al intendente Sánchez en una reunión que hoy (por ayer) tuve con él. Ya no se puede recaer en la responsabilidad de la gente porque claramente no alcanza". 

"El lunes o martes le voy a acercar alguna propuesta, pero me parece que desde el municipio se deben tomar decisiones fuertes. El intendente, por ejemplo, tiene facultades para determinar un retroceso de fase. No es algo que solo dependa de la Provincia", señaló. 

Para el concejal, ante el incremento de contagios por Covid-19 registrado en las últimas jornadas en el distrito, "hay que hacer algo. La situación sanitaria, por lo que el doctor Guerra dice en sus informes, está al borde del colapso".

"Tengo la impresión, y lo digo a título personal, de que hay cierta resignación en el municipio. Como que esto que está pasando era inevitable. No creo que eso sea así, ya que hay cosas para hacer. No digo que no se está haciendo nada. Lo que creo es lo que se ha hecho no alcanza y que los resultados no fueron los esperados", dijo quien es presidente del bloque del Frente de Todos en diálogo con La Voz del Pueblo.

"Esto no es una cuestión partidaria. Son ideas que después el intendente podrá compartir o no con nosotros. Algo hay que hacer. Habrá que reforzar los controles, ponerse más estricto. El camino que se está tomando ahora no es bueno y lo reconocen el propio intendente y el secretario de Salud". 

Agregó: "No me creo dueño de la verdad, pero yo haría una fuerte campaña de difusión, pondría más personal a controlar y, en ciertos casos, sería más duro y estricto. Algo hay que hacer. Ya no alcanza con apelar a la responsabilidad social".