Proteccionistas de animales intensifican sus actividades en Miramar

Con el surgimiento del Capítulo Miramar de la Fundación Fauna Argentina, un grupo de voluntarios brinda una mano ante sucesos reiterados pero con una habitual complicación para quienes los detectan: qué hacer al momento de hallar animales marinos con complicaciones en nuestras costas.

Fernando Palavecino, una de sus caras visibles en la localidad, recomendó no acercarse y llamar inmediatamente al puesto de la Prefectura Naval Argentina en Miramar al 02291433917, ya que poseen un convenio para concurrir a estos lugares. "El tema es comprender que están dentro de su hábitat: salen a la costa a descansar porque recorren largas distancias. Recomendamos a la gente que no se acerque generalmente porque corre riesgo su integridad física", pidió.

"No sabemos por qué salen. Cuando se trata de un pingüino, salen generalmente a descansar o a morir porque tienen un alto porcentaje de mortandad. Liberamos uno hace algunas noches para que la gente no esté y a la mañana siguiente nos enteramos que lo mataron entre 3 ó 4 perros cerca del muelle y todo nuestro trabajo se vio desperdiciado", comentó.

"Le pedimos a la gente que no se acerque, que no los ingrese al mar, que no les den de comer, en lo posible que llamen a Prefectura porque nosotros tenemos nuestros teléfonos personales y ellos nos avisan. Nos movemos por nuestros propios medios y costeamos todos los gastos", desarrolló el referente.

"El Capítulo Miramar empezó hace más o menos un año, en una ocasión en que apareció un lobo de un pelo -el característico de Mar del Plata en la Escollera Sur- y ví a un hombre con sus tres hijos intentando que se parara para sacar la foto tradicional tirándole piedras. Ahí me hizo el click de empezar a trabajar en el tema porque alguien tenía que hacerse cargo de esa labor. Como no había nadie, tomé la iniciativa de comunicarme con la Fundación Fauna Argentina y ahí comenzamos", agregó Palavecino, con antecedentes en trabajos de este tipo al acompañar al médico veterinario Osvaldo Castán.

Ante la aparición de especies -incluso en buen número- durante buena parte de febrero e inicios de marzo, el voluntario dio cuenta de que se hallaron unos 150 pingüinos de Magallanes muertos a la altura del arroyo Chocorí. "No pudimos hacerle la necrosis necesaria a los animales porque ya tenían varias horas de muertos, y no es que salían por sus propios medios sino que eran arrastrados por las olas hasta la orilla, algunos ya muertos y otros moribundos", explicó.

"Somos 8 voluntarios y en algún momento vamos a sumar más porque queremos que todos hagan sus primeras armas en esto. Ya estamos prácticamente teniendo los candidatos. Hay un montón de gente quiere colaborar, más de la que pensábamos, pero vamos más despacio porque es difícil manejar tanta gente y necesitamos un espacio y ya estamos trabajaando en ese sentido", concluyó Fernando.