Empresario marplatense pagó 11 millones de pesos por una camiseta autografiada por Messi
En Mar del Plata se vio una nueva muestra de la pasión que Messi despierta en fanáticos del fútbol del mundo entero: un empresario pagó 11 millones de pesos por una camiseta firmada por Lionel Messi, capitán de la Selección Argentina en una gala benéfica.
Sucede que para reunir fondos para el hospital Materno Infantil de Mar del Plata se organizó la XXIII Cena de Gala Solidaria de Fudami, que fue el escenario de una increíble puja por obtener la camiseta del 10 argentino, figura indiscutible de la Copa del Mundo Qatar 2022.
El hotel Salón Real del Hotel Costa Galana recibió a representantes de la sociedad marplatense, con una figura estelar: Mirtha Legrand, Madrina Honoraria de la Fundación. Fue justamente la diva de la televisión la que decidió donar la camiseta que le envió el propio Messi.
El objetivo era recaudar fondos para construir una residencia de madres y el área de terapia ocupacional y kinesiología del Materno. Las reformas alcanzan a 150 metros cuadrados del inmueble, la ampliación de 142 metros cuadrados y la construcción de una terraza exterior de 37 metros cuadrados.
Para concretar todas esas obras la recaudación de la cena solidaria debía ser importante y por eso los organizadores llevaron la camiseta firmada por el capitán argentino.
La subasta de los 11 millones
La subasta de la camiseta número 10 de la Selección Argentina con la firma de Lionel Messi en el pecho comenzó con una base de 500 mil pesos. Montada sobre un vidrio y con las pantallas gigantes mostrando los festejos del equipo dirigido por Lionel Scaloni en Qatar los presentes se fueron entusiasmando con la posibilidad de quedarse con el “tesoro”.
Diferentes personalidades y empresarios presentes en el Salón Real del Hotel Costa Galana comenzaron a ofertar dinero y fueron subiendo el monto. Pero a medida que el valor iba en aumento muchos de los interesados fueron resignándose a perderla.
La puja terminó siendo un mano a mano entre dos empresarios, uno vinculado al juego y el otro, un marplatense propietario de una firma radicada en el Parque Industrial. Uno ofertaba, el otro subía. Y así llegaron al final: el hombre de Mar del Plata se quedó con la imponente camiseta por la suma de 11 millones de pesos. Una locura absoluta que solo se entiende por la “Messimanía”
