Otra búsqueda en el mar: Alquiló un kayak, se metió al mar en Claromecó y desapareció
Un inquietante hecho mantiene en vilo a la comunidad tresarroyense, después de que un joven de 25 años alquilara un kayak el pasado domingo 21 de enero y se aventurara en las aguas del mar de Claromecó, para no ser visto ni contactado desde entonces.
La alarma fue dada por sus propios familiares, quienes, tras varias horas sin noticias de Federico Saihueque Cuevas, decidieron presentar una denuncia formal. Según relataron, el joven había alquilado un kayak de color negro en sus extremos y parte media naranja, un modelo Skandinavyan diseñado para una sola persona, en un balneario de la localidad de Tres Arroyos.
Las autoridades locales, encabezadas por la policía comunal, se unieron en un operativo de búsqueda para dar con el paradero de Saihueque Cuevas. Un comunicado oficial detalló que el kayakista había sido visto por última vez el domingo a aproximadamente 5.000 metros mar adentro, en línea recta a la bajada de Dunamar, pasadas las 19 horas. En ese encuentro visual, al ser invitado a regresar a la costa, el joven manifestó encontrarse bien.
La búsqueda se encuentra en manos de diversas fuerzas, incluyendo personal municipal, la policía bonaerense y la Prefectura Naval Argentina. El municipio confirmó que las labores de rescate abarcan tanto la tierra como el agua, extendiéndose desde el arroyo Cristiano Muerto hasta el Río Quequén, cubriendo toda la jurisdicción costera de Claromecó.
Familiares y amigos de Saihueque Cuevas han movilizado una campaña de difusión en las redes sociales para amplificar la búsqueda y recabar cualquier información que pueda ayudar a dar con el paradero del joven. En este contexto, la Municipalidad de Tres Arroyos emitió un informe sobre las acciones desplegadas en la búsqueda, destacando la colaboración de la Policía Comunal, el Personal Municipal, los Bomberos Voluntarios de Claromecó y la coordinación a cargo de la Secretaría de Seguridad.
Además, la Prefectura Naval Argentina ha desplegado recursos para la búsqueda acuática, incluyendo el GC 68, un guardacostas proveniente del Río Paraguay, una embarcación liviana y una moto de agua. Se espera que en las próximas horas se una a la operación una aeronave especializada en la búsqueda de objetos.
Este lamentable incidente se suma a una serie de casos recientes en la región, como la desaparición de los amigos kayakistas Ramón Román (57 años) y Gabriel Raimann (37) en Cariló el pasado 14 de enero. Aunque se encontró el bote en cuestión, la Prefectura Naval se puso en contacto con los familiares para informarles que no tienen expectativas de hallar a los desaparecidos con vida.
En consecuencia, las fuerzas de seguridad intensificarán los esfuerzos en el operativo especial, abandonando el protocolo SAR utilizado hasta ahora, ya que este se aplica exclusivamente para localizar personas con signos vitales.
