Agentes de la DDI local llevaron a cabo este sábado allanamientos en dos viviendas de la ciudad, resultando en la aprehensión de dos hombres acusados de robo agravado en poblado y en banda, con uso de arma de fuego.
La investigación comenzó el pasado 21 de junio, cuando una pareja de comerciantes denunció que, mientras trabajaban en su feria de ropa ubicada en la calle 63 al 800, un hombre vestido con camisa, saco y corbata, y portando una biblia, ingresó al local preguntando por el precio de distintas prendas.
En un primer momento, esta situación no llamó la atención de los comerciantes. Sin embargo, l hombre sacó un arma de fuego de entre sus ropas, amenazando al propietario del negocio y obligándolo a tirarse al piso.
Simultáneamente, el delincuente ordenó a la mujer que atara las manos de su pareja con un precinto. Una vez sometidos, el asaltante comenzó a exigir la entrega de dinero, advirtiendo que fuera del local se encontraban tres cómplices que, si él los llamaba, ingresarían y tomarían "por las malas" el dinero y cualquier objeto de valor. Aprovechando un descuido del ladrón, la mujer logró escapar corriendo del lugar. Ante esta situación, el delincuente decidió huir, llevándose consigo varias prendas del comercio.
Tras la denuncia, la UFI 30 intervino y derivó la investigación a la DDI Necochea. Los detectives comenzaron una serie de tareas de campo, destacándose la recepción de testimonios y el análisis de las cámaras de seguridad, tanto municipales como privadas. Posteriormente se pudo identificar el recorrido realizado por el delincuente y sus cómplices, y también que habían realizado tareas de inteligencia en los días previos al robo.
Uno de los detalles clave fue que uno de los delincuentes, siempre vestido de camisa, saco y corbata, portaba una biblia, coincidiendo con los testimonios que describían a un supuesto predicador religioso que había visitado el local en repetidas ocasiones antes del robo, interactuando con los clientes y predicando discursos religiosos.
Con las identidades y domicilios de los sospechosos individualizados, la UFI solicitó al Juzgado de Garantías 1 Departamental dos órdenes de allanamiento. Con las órdenes judiciales en mano, este sábado, la DDI desplegó un operativo que incluyó a sus agentes, así como a los de la SubDDI Lobería y la Unidad Táctica Especial GAD. Los allanamientos se llevaron a cabo en una vivienda ubicada en la calle 22 entre 57 y 59, y en otra en la calle 20 al 3300.
En la primera de las propiedades, se aprehendió a un hombre de 32 años, en cuyo poder se encontraron numerosas prendas de vestir, algunas de las cuales fueron identificadas como las sustraídas del comercio y otras utilizadas durante las jornadas de inteligencia previa. En la segunda vivienda, se aprehendió a un joven de 24 años, en cuyo poder se secuestraron equipos de telefonía celular, una mochila, biblias y prendas de vestir, incluyendo la camisa blanca, corbata y saco con los cuales uno de los delincuentes se hacía pasar por predicador religioso.
Ambos detenidos se encuentran actualmente alojados en la DDI, a la espera de ser indagados por el magistrado interviniente. La investigación continúa su curso, y no se descartan nuevas medidas en los próximos días, ya que las autoridades buscan desarticular por completo a la banda delictiva responsable de este planificado robo.