Tasa Portuaria: "Estamos esperando que la paguen para poder arreglar las calles"

En el cierre de la semana pasada la Comisión de Transporte del Concejo Deliberante de Necochea fue el escenario para la presentación del informe de la Secretaría de Legal y Técnica del municipio acerca del estado de cobro de la Tasa Solidaria por Mantenimiento Diferenciado de la Red Vial, conocida como la nueva tasa portuaria.

El secretario Ernesto Povilaitis informó a los concejales presentes acerca de la cobrabilidad de la tasa como así también "las acciones legales por parte de las exportadoras que se han llevado a cabo", informó el Concejo tras el informe. El funcionario contó que ya se hizo una primera liquidación de tres meses y que faltan liquidar 6 más, aunque se está en espera de la resolución judicial por las objeciones interpuestas por las terminales exportadoras.

Todo el asunto se inició con un pedido de informes del concejal Julián Kristiansen, quien operó políticamente en favor del municipio para impulsar una tasa que en el pasado ha sido inaplicada. Kristiansen además aspira a un cargo dentro del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén y representa una vertiente sindical de camioneros. Luego de aprobarse la tasa el año pasado, su agenda continúa con el intento de crear una comisión de seguimiento que le permitiría al municipio hacer reclamaciones al puerto de manera indirecta, tensando sin romper el vínculo entre el intendente Rojas y los mandos de la terminal portuaria.

El concejal señaló que en el informe Povilaitis detalló que la liquidación "ronda los 1500 millones de pesos y en el debido caso de que no lo paguen van a tener penalidades y punitorio". "Y falta la liquidación de 6 meses más la cuál está esperando a la resolución de un fallo de un contencioso en el cuál lo iniciaron ellos para no pagar esos tres meses y bueno, por lo que nos estaba contando Povilaitis hay altas posibilidades que se paguen", dijo el concejal. 

Aprovechando el escolazo, ahora Kristiansen propone una nueva norma para generar una comisión permanente de seguimiento de la tasa, multiplicando el proceso que, por lo pronto, todavía no ha conseguido avanzar más que otras experiencias similares del pasado. El último intendente que intentó seriamente cobrarle la tasa portuaria a las exportadoras terminó su mandato en medio de un exagerado escarnio público ejecutado por quienes ahora amagan con el mismo movimiento. 

 "Se está haciendo una bola de nieve y los fallos están dando a favor de la cobrabilidad así que creo que las exportadoras en algún momento van a tener que las terminales tener que dialogar y consensuar con el municipio y nosotros desde el punto de vista del Poder Legislativo somos los que defendemos los intereses de nuestros vecinos, es una deuda que no se le debe al Ejecutivo sino a todos los vecinos y vecinas del distrito de Necochea", explicó el concejal.

"Estamos esperando que la paguen para poder arreglar las calles, así de simple", resumió Kristiansen casi como si fuera un vocero del Ejecutivo. 

Según Julián, Povilaitis dijo 1500 millones

El informe de Povilaitis y las advertencias en el relato de Kristiansen llegan en momentos en los que la Comuna comienza a enfrentar dificultades de financiamiento, con pagos atrasados y toda clase de tareas pendientes: sin mayor contacto con la gobernación, con fría vinculación con el Consorcio, y ante la articulación imposible con el Gobierno Nacional, el municipio recurre al intento de la nueva tasa portuaria a través de un aliado político aprovechando los vientos de cambio que soplan en toda la provincia tras la victoria peronista.

Aunque la Comuna intenta proyectar optimismo sobre las resoluciones judiciales pendientes (hay 6 objeciones diferentes en marcha), valiéndose del precedente de la gestión de Facundo López, el reclamo no cuenta mayor fuerza política y puede que termine siendo un tema pictórico más en la agenda legislativa, con declamaciones sostenidas y buena voluntad aunque de resultados magros, sino vacuos en su complitud.