Todo trastocado, todo distorsionado: la impostación de las autoridades municipales frente a las protestas de estudiantes en el Complejo Jesuita Cardiel llevan la marca de los tiempos y muestra a la vez la completa ineficacia de algunos funcionarios en tratar temas que los exceden ampliamente. Siguiendo el estilo del presidente Milei, que denuncia penalmente por igual a periodistas, niños autistas u opositores, en Necochea la Comuna difundió que denunciaron por daño a estudiantes por pegar afiches lavables en una pared.
Es que en el marco de los reclamos para que las autoridades corten el pasto y den mantenimiento al alumbrado del predio, un grupo de estudiantes pegó afiches en la sede policial del ingreso donde funciona una dependencia de la Coordinación de Políticas de Género del municipio.
Los carteles son fácilmente removibles con agua (Cuatro Vientos dispone de una hidrolavadora que podría facilitar en comodato a la Secretaría de Gobierno preocupada por el "daño") y rezaban consignas llamando la atención de la dependencia frente al riesgo que corren las estudiantes en semejante laberinto de ruinas con pastizales, sin iluminación ni cámaras donde frecuentemente se producen robos y ataques.
Como toda respuesta, las autoridades municipales anunciaron por medios afines que se radicó una "denuncia por daño" de las instalaciones, siguiendo la política de persecusión penal de la protesta que ya tiene antecedente en el caso de Pierina Nochetti, perseguida por una pintada en el Anfiteatro. A esa amenaza luego sumó la dilación del tema, recibiendo a las estudiantes y directivas en el HCD prometiendo nuevas reuniones en el futuro. Una comisión sobre otra comisión, etc.

Y por si hace falta recordarlo, la Secretaría de Gobierno "preocupada" por la seguridad todavía no hizo mención oficial en la web municipal ni al asesinato del joven adolescente frente al Casino de hace 15 días, ni al de la mujer mochilera enterrada en el Lago de los Cisnes la semana pasada y concentra su atención en un programa de vigilancia entre vecinos.
Literalmente pasaron casi tres días hasta que se pudo ver por una cámara como un asesino arrastraba el cuerpo de su víctima cruzando una calle en medio de un centro turístico de la ciudad en pleno fin de semana.
En ese contexto, hay mujeres reclamando expresamente que temen que eso les pase a ellas en su lugar de estudio y el municipio reacciona denunciándolas por "daño". La promoción de la denuncia (que habría sido radicada la semana pasada) causó un efecto y algunos de los manifestantes expresaron su intención de desmovilizarse por el temor a que las autoridades los persigan con la Justicia.
El ridículo de los funcionarios municipales que mandan a los medios a decir que hay denuncias penales para asustar a estudiantes no sería tal si la situación no fuera tan evidente y reflejara tan acabadamente su ineptitud para dar respuestas al problema que le estalla en toda la cara.
Para entender la peligrosidad criminal de las estudiantes manifestantes va el video que realizaron para visibilizar su protesta. Esta es la clase de personas que el Estado municipal busca perseguir con sus denuncias a la Justicia: