NECOCHEA (Cuatro Vientos) – Impensado, pero real. Una simple rifa puso en jaque a todo Chascomús. La razón se remonta a 1995, cuando dos mujeres de esa ciudad ganaron un sorteo con un tentador premio: un campo de 327 hectáreas aptas para la agricultura.
Los problemas en torno al premio empezaron cuando Sonia Della Vedova de Godoy y Clorinda del Carmen Gallego de Sandoni, las beneficiadas, lo reclamaron. Como no pudieron gozarlo, presentaron una demanda millonaria y el conflicto escaló a la Corte Suprema de Justicia. Por eso, el municipio tendrá que hacerse cargo.
De acuerdo a lo publicado en el sitio Diario Veloz, el sorteo había sido organizado por tres escuelas rurales con autorización del Concejo Deliberante y el campo era, supuestamente, propiedad de una empresa contratada para llevar adelante la rifa. Al final la organización sólo tenía un boleto de compra del inmueble y por lo tanto no había escritura. Allí comenzó una batalla legal que duró 20 años.
En 1998 las ganadoras denunciaron ante el Juzgado Civil y comercial Nº27 a las cooperadoras, a la Provincia y a la empresa. En una primera instancia, todos los acusados fueron condenados a resarcir a las ganadoras, pero la Justicia hizo responsable a la Municipalidad de forma integral por la irregularidad y la condena al pago de los daños y perjuicios y el lucro cesante.
La indemnización se calculó en 15 mil dólares por hectárea, más el retraso de la entrega del premio, lo que sumó un total de más de 100 millones de pesos.
El fallo fue ratificado por la Cámara y la Suprema Corte bonaerense y ahora está en evaluación del máximo tribunal. Si la Corte Suprema ratifica el fallo, Chascomús deberá pagar unos 100 millones de pesos, una cifra exorbitante para un municipio que tiene un presupuesto anual de 250 millones.
Las autoridades comunales creen que, hasta ahora, será difícil revertir el fallo y tampoco hay posibilidades de indemnizar a las ganadoras, lo cual significa que el municipio quedaría al borde de la quiebra.