Negaron la excarcelación a Marcos Aprea

Marcos Aprea, de 32 años, sigue detenido tras haber atropellado y matado al docente Germán Apella en un trágico accidente en la avenida 42 entre las calles 95 y 97. El siniestro, ocurrido en la madrugada del 20 de junio, dejó a la comunidad de Necochea conmocionada por la pérdida de un querido miembro de la comunidad educativa.

El caso, caratulado como “homicidio culposo agravado,” sigue avanzando bajo la supervisión de la jueza de Garantías Nº 2, Aída Lhez, y del fiscal José Luis Cipolletti. Aprea fue detenido después de que se comprobara que manejaba con 1.54 gramos de alcohol por litro de sangre, una cantidad muy superior al límite legal permitido.

En una reciente audiencia en el Juzgado de Garantías, el fiscal Cipolletti se opuso firmemente a la liberación de Aprea, argumentando la gravedad del delito y el riesgo de reincidencia. A pesar de esto, se ha solicitado al Servicio Penitenciario Bonaerense que evalúe la posibilidad de otorgar al acusado el sistema de monitoreo con pulsera electrónica. Este beneficio podría ser concedido en los próximos días, permitiendo que Aprea cumpla arresto domiciliario en una residencia en la Villa Balnearia, bajo la supervisión de otra persona.

El trágico hecho tuvo lugar cuando Germán Apella, de 37 años, caminaba junto a una joven por la avenida 42. Se dirigían hacia un inmueble que Apella alquilaba en la calle 40, cerca de la avenida 75. La fuerza del impacto fue tal que Apella murió instantáneamente.

El Colegio Alemán y el Instituto Humboldt, donde Apella trabajaba, emitieron comunicados expresando su dolor y recordando al docente como una figura entrañable y dedicada. La noticia de su fallecimiento provocó una ola de consternación entre colegas, alumnos y familiares, quienes exigen justicia por su pérdida.

Marcos Aprea, cuyo destino legal aún está por definirse, enfrenta una posible pena de entre 3 y 6 años de prisión por el delito de homicidio culposo agravado.